Es un reto importante el que
Diego Morales se ha impuesto este año para la Feria del Padul, nada más y nada
menos que un hojaldre gigante de verduras para degustar por todos los paduleños
y visitantes que se acerquen a la caseta municipal el viernes a mediodía.
Ilusión y ganas de hacerlo bien
no faltan, colaboradores tampoco y así Catering Ibagar nos cede sus
instalaciones para preparar la verdura en su punto justo de cocción, ingeniería
San Isidro nos cede los ingredientes, panadería Elisabet prepara el hojaldre,
el Ayuntamiento su inestimable colaboración en la infraestructura así como sus
amigos cocineros de Granada, Toni, Brasero, Ayala y sus habituales de Padul,
Gracia, Antonio José y Diego hijo. Muchas manos y mucha colaboración que
siempre hace falta.
Los trescientos ochenta kilos de
verdura de hacinan en “la lavadora” antes de ser picadas, kilos y kilos de
tomates, berenjenas, calabacinos, ajos, cebollas, pimientos verdes y rojos de nuestro
Valle que poco a poco se convierten en un pisto que va llenando los barreños
antes de ser aliñados por toda clase de hierbas aromáticas. El buen saber de
Diego conforma en su punto las bandejas que pasan al a cocerse como punto final
en ésta fase. Traslado posterior al horno de Elisabet que prepara el hojaldre
para cubrirlo y darle el remate final. Un poco menos de treinta metros se van
extendiendo en la mañana del viernes en unos de los laterales de la caseta.
Hierbas aromáticas lo decoran de punta a punta y los nervios al verlo en la
mesa larga e inmensa desaparecen como por ensalmo. El alma retorna al cuerpo de
Diego que ya por fin respira satisfecho. Sólo falta que todo el mundo responda
a un trabajo bien hecho y que como broche final se recaude algo de dinero con
el que ayudar un poco en el tratamiento de Lara que tan bien le viene.
Y sí… la cola de personas se
acumula desde tiempo antes con gesto de sorpresa y admiración, se mide el
hojaldre… 26,2 metros…ahí es nada, el alcalde, la pregonera Carmen, los
patrocinadores, los colaboradores…todos se aprestan a saborearla. El éxito
total… “pica un poco…”, “pero qué buena…”, “que bien sabe…”, “rica…rica…”. Las
felicitaciones se acumulan y hasta Gregorio de Ibagar que al final vino a
recibir su pequeño homenaje se sintió más que satisfecho.
El fin mereció la pena, el trabajo
también, todos los asistentes y sus aplausos así lo corroboran y Diego…bueno
pues Diego ya pensando en el año que viene… otra sorpresa.
Enhorabuena a todos y por
supuesto para nosotros ha sido el hojaldre más grande del mundo con las
verduras mejores del mundo y las personas… pues las mejores también. Los que
dieron buena cuenta del hojaldre así lo contaron.
No hay comentarios:
Publicar un comentario